Yo

Decir de mí que soy un canario afincado en Aragón. Hijo adoptivo de una tierra que una vez busqué y en la que elegí quedarme.

Con el paso del tiempo me he dado cuenta que echo de menos mi tierra, más de lo que yo hubiera llegado a pensar, mi familia y mi mundo, creado en la infancia y en la juventud. Pero ahora soy mayor, todo ha cambiado. Los recuerdos están ahí y cada vez que siento nostalgia me abrigo con ellos y con su calor me siento bien. Me reconforta.

Aragón me ha fortalecido. He madurado como fruta bajo el sol abrasador del verano, el frío helador del invierno y también por el cierzo.

Evolucionado y caminado por el mundo de la mano de amigos de aquí y allí, de buenos y malos amantes. De todos he aprendido cosas.

Avanzar es la palabra y el hecho.